al volver a casa ya no estan en la esquina de siempre
rara vez nos llamamos o nos mandamos algun mensaje
tan solo me queda recordar lo que alguna vez vivimos
ya no voy a la casa de omar para ayudarlo a limpiar su patio
ya ni siquiera tiene patio ni esa maca que tanto me gustaba
ya no es el mocoso que no sabia bailar trompo
a estas alturas de la vida eso ya no interesa
ya no jugamos pelota con dos piedras de arco
ni usamos el muro de la casa de alvaro como valla
ya no veo a sergio con su risa siempre espontanea
el ya es padre de familia y tal vez las cosas han cambiado
hasta a veces extraño las quejas del señor aranda
y sus amenazas por ensuciar y hacer bulla en la puerta de su casa
recien empiezo a entender que el tiempo pasa muy de prisa
ya no tengo mis dos horas de permiso por la tarde
ahora ya estoy muy lejos de mi hogar
ya no tengo los gritos de mi viejo por no ir al colegio
ni los jalones de oreja por no hacer los deberes
ya no tengo mi hora de television al dia
ni mi hora de sermon en la noche
ya no tengo miedo a la oscuridad
ni a los duendes de mi infancia
somos niños jugando a ser grandes
grandes que quieren ser niños
niños con problemas de grandes
y grandes que lloran como niños
grandes frustrados por sueños olvidados y niños olvidados por que los grandes se han frustrado